lunes, 30 de marzo de 2009

Papel profético de la escuela católica












(De la intervención del arzobispo Brugués en Chile)

CONCEPCIÓN, viernes 27 de marzo de 2009 (ZENIT.org).- "La escuela católica desempeña un papel profético", ha asegurado en Chile el arzobispo Jean Louis Brugués, secretario de la Congregación para la Educación Católica.



En un encuentro con los rectores y educadores de colegios de Iglesia de la ciudad de Concepción el prelado francés constató que en el mundo existen 1.200 universidades católicas, 2.700 seminarios y unas 250 mil escuelas católicas. Estos números, aclaró, explican la extraordinaria oportunidad que tiene la Iglesia.
"Es un contacto único con la juventud --reconoció--, hay naturalmente otros contactos en la parroquia, los movimientos, pero me parece que la escuela católica desempeña un papel único en el sentido de que dentro de la escuela el niño se construye en todas sus dimensiones", aseguró monseñor Brugués.



Según el arzobispo, la escuela católica ofrece, en este sentido, una formación integral. No es sólo una formación intelectual, aunque tenga una gran importancia, aclaró, sino además una formación humana afectiva y espiritual.



"Si el alumno ha tenido la oportunidad de conocer dentro de la escuela una formación completa, que le haga feliz, siempre durante toda su vida tendrá una visión armoniosa de la Iglesia", aseguró. Indicó que la primera impresión es siempre la mejor. En ese sentido, hizo ver que la responsabilidad de los educadores es grande. "Para mí, lo digo como profesor, es una de las vocaciones más bonitas del mundo. El contacto con la juventud ha sido una fuente de juventud para mi mismo. Uno no se envejece cuando se mantiene en contacto con la juventud", comentó.
Identidad católica


El prelado consideró que el primer desafío que se plantea hoy a las escuelas de la Iglesia es el de comprender lo que significa su identidad católica.
"Ese problema se plantea en el mundo entero. Me parece que nos ayuda la etimología. Qué significa la palabra católica: el primer sentido es universal. Y eso, supone dos consecuencias, la primera universalidad de saber, una escuela católica es una escuela abierta al abanico completo del saber, subrayando que se puede hablar de la escuela católica como una escuela de excelencia".
Y respecto al concepto de "universal", monseñor Brugués sostuvo que significa también apertura a todos.



"La escuela católica es una escuela abierta a todos y diría, sobre todo a los que no tienen cultura, a los más pobres; significa poner la excelencia a disposición de todos , en especial de los que no tienen recursos para alcanzar este nivel de cultura. En este sentido podemos decir que la escuela católica desempeña un papel profético", resaltó. Ahora bien, siguió diciendo, la palabra católica tiene un segundo sentido: "es decir, la confesión de una fe particular: la fe católica".



"Confesión de fe católica significa que la escuela debe ofrecer, no obligar ni imponer, un camino de fe, un camino de descubrimiento de la fe. No podemos pedir a todos los profesores presentarse con una fe completa. Es algo de conciencia. La Iglesia ayuda a la conciencia, no se impone a la conciencia. El sueño sería que un adulto, con una fe con dudas, con una fe débil, tenga la posibilidad de descubrir un camino de madurez para la vida", dijo. Finalmente, y pensando en particular en los alumnos, monseñor Brugués expresó que la escuela católica representa la cara materna de la Iglesia y el educador es el sacramento, el signo sensible, de la ternura de Dios.



"Naturalmente cada uno manifiesta esta ternura a su manera, por su carácter, su formación, su edad, su identidad sexual. Lo que necesita más el hombre es el amor y el amor de Dios se descubre al principio, en una escuela Católica".


sábado, 28 de marzo de 2009

Experiencia: conocimiento y afectividad




(De Pedagogía Ignaciana – un planteamiento práctico)

43 Usamos el término EXPERIENCIA para describir cual­quier activi­dad en la que, junto a un acercamiento cognoscitivo a la reali­dad de que se trata, el alumno percibe un sentimiento de natura­leza afectiva. En cualquier expe­riencia, el alumno percibe los datos cognitivamente. A fuerza de pre­gun­tarse, imagi­nar e investigar sus ele­men­tos y relaciones, el alumno estructura los datos en una hipótesis. «¿Qué es esto? ¿Se parece a lo que ya conozco? ¿Cómo funciona?» Y sin me­diar una elección deliberada surge ya la reacción afectiva espontánea, por ejemplo: «Me gusta... Me da miedo... No me van este tipo de cosas... Es interesan­te... Me abu­rro...»

(44) Al comenzar nuevas lecciones, el profesor puede percibir con frecuencia cómo los senti­mientos de los alumnos les ayudan a crecer. Pues es raro que un alumno experimente algo nuevo en el estudio y no lo relacione con lo que previamente cono­ce. Los nuevos hechos, ideas, puntos de vista, o teo­rías, suponen casi siempre un desafío a lo que el alumno sabe sobre el tema. Esto implica un crecimiento, una comprensión más plena, que pue­den modificar o cambiar los conocimientos que uno creía poseer ya satis­factoriamente. La confrontación de un nuevo conocimiento con lo que uno ya sabe, especialmen­te cuando lo nuevo no encaja exac­ta­mente con lo cono­cido, no puede limitarse simple­mente a la memorización o asimilación pasiva de datos adicio­nales. El alumno se inquieta al darse cuenta de ­que no en­tien­de las cosas plena­mente. Y esto le empuja a nuevos intentos para com­­pren­der me­jor, -análisis, com­paraciones, contrastes, síntesis, eva­luación-, todo tipo de actividades menta­les y psicomotrices, en las que los estu­­diantes están atentos a captar la reali­dad más profundamente.


jueves, 26 de marzo de 2009

Encuentro del Papa con la Juventud en Angola

(Extraido del discurso del Papa en el Estadio Dos Coqueiros - Luanda, sábado 21 de marzo de 2009)

"Queridos amigos:
Habéis venido muchos, representando a otros muchos más que están espiritualmente unidos a vosotros, para encontrar al Sucesor de Pedro y proclamar conmigo ante todos la alegría de creer en Cristo y renovar el compromiso de ser sus fieles discípulos en nuestro tiempo. Un encuentro parecido tuvo lugar en esta misma ciudad el 7 de junio de 1992 con el amado Papa Juan Pablo II; con los rasgos un poco diferentes, pero con el mismo amor en el corazón, aquí tenéis al actual Sucesor de Pedro, que os abraza a todos en Cristo Jesús, que «es el mismo ayer, y hoy y siempre» (Hb 13,8).

Deseo, ante todo, daros las gracias por esta fiesta que me ofrecéis, por la fiesta que sois vosotros, por vuestra presencia y vuestro gozo. Dirijo un saludo afectuoso a los venerados Hermanos en el Episcopado y en el Sacerdocio, así como a vuestros animadores. Os doy las gracias de corazón y saludo a cuantos han preparado este encuentro y, en particular, a la Comisión episcopal para la Juventud y las Vocaciones, con su Presidente, Mons. Kanda Almeida, al que agradezco las amables palabras de bienvenida que me ha dirigido. Saludo a todos los jóvenes, católicos y no católicos, que buscan una respuesta a sus problemas, algunos de los cuales han sido seguramente indicados por vuestros representantes, cuyas palabras he escuchado con gratitud. Naturalmente, el abrazo a ellos, vale también para todos vosotros.

Encontrarse con los jóvenes hace bien a todos. Tal vez tengan muchos problemas, pero llevan consigo mucha esperanza, mucho entusiasmo y deseos de volver a empezar. Jóvenes amigos, lleváis dentro de vosotros mismos la dinámica del futuro. Os invito a mirarlo con los ojos del Apóstol Juan: «Vi un cielo nuevo y una tierra nueva… y también la ciudad santa, la nueva Jerusalén, que descendía del cielo, enviada por Dios, arreglada como una novia que se adorna para su esposo. Y escuché una voz potente que decía desde el trono: “Ésta es la morada de Dios con los hombres”» (Ap 21,1-3). Queridísimos amigos, Dios marca la diferencia.

Amigos míos, vosotros sois una semilla que Dios ha sembrado en la tierra, que encierra en su interior una fuerza de lo Alto, la fuerza del Espíritu Santo. No obstante, para que la promesa de vida se convierta en fruto, el único camino posible es dar la vida por amor, es morir por amor. Lo dijo Jesús mismo: «Si el grano de trigo no cae en tierra y muere, queda infecundo; pero, si muere, da mucho fruto. El que se ama a sí mismo, se pierde, y el que se aborrece a sí mismo en este mundo, se guardará para la vida eterna» (Jn 12,24-25). Así habló y así hizo Jesús: su crucifixión parece un fracaso total, pero no lo es. Jesús, en virtud «del Espíritu eterno, se ha ofrecido a Dios como sacrificio sin mancha» (Hb 9,14). De este modo, cayendo en tierra, pudo dar fruto en todo tiempo y a lo largo de todos los tiempos.

Jóvenes amigos, semillas con la fuerza del mismo Espíritu Eterno, que han germinado al calor de la Eucaristía, en la que se realiza el testamento del Señor. Él se nos entrega y nosotros respondemos entregándonos a los otros por amor suyo. Éste es el camino de la vida; pero se podrá recorrer sólo con un diálogo constante con el Señor y en auténtico diálogo entre vosotros. La cultura social predominante no os ayuda a vivir la Palabra de Jesús, ni tampoco el don de vosotros mismos, al que Él os invita según el designio del Padre. Queridísimos amigos, la fuerza se encuentra dentro de vosotros, como estaba en Jesús, que decía: «El Padre, que permanece en mí, Él mismo hace las obras... El que cree en mí, también él hará las obras que yo hago, y aún mayores. Porque yo me voy al Padre» (Jn 14,10.12). Por eso, no tengáis miedo de tomar decisiones definitivas. Generosidad no os falta, lo sé. Pero frente al riesgo de comprometerse de por vida, tanto en el matrimonio como en una vida de especial consagración, sentís miedo: «El mundo vive en continuo movimiento y la vida está llena de posibilidades. ¿Podré disponer en este momento por completo de mi vida sin saber los imprevistos que me esperan? ¿No será que yo, con una decisión definitiva, me juego mi libertad y me ato con mis propias manos?» Éstas son las dudas que os asaltan y que la actual cultura individualista y hedonista exaspera. Pero cuando el joven no se decide, corre el riesgo de seguir siendo eternamente niño.

Yo os digo: ¡Ánimo! Atreveos a tomar decisiones definitivas, porque, en verdad, éstas son las únicas que no destruyen la libertad, sino que crean su correcta orientación, permitiendo avanzar y alcanzar algo grande en la vida. Sin duda, la vida tiene un valor sólo si tenéis el arrojo de la aventura, la confianza de que el Señor nunca os dejará solos. Juventud angoleña, deja libre dentro de ti al Espíritu Santo, a la fuerza de lo Alto. Confiando en esta fuerza, como Jesús, arriésgate a dar este salto, por decirlo así, hacia lo definitivo y, con él, da una posibilidad a la vida. Así se crearán entre vosotros islas, oasis y después grandes espacios de cultura cristiana, donde se hará visible esa «ciudad santa, que descendía del cielo, enviada por Dios, arreglada como una novia». Ésta es la vida que merece la pena vivir y que de corazón os deseo. Viva la juventud de Angola".

martes, 24 de marzo de 2009

Inculturación y servicio educativo en África

(Extraído del Instrumento de Trabajo del próximo Sínodo de los Obispos de África)

73. O Evangelio se enraíza en el terreno humano de la cultura. Las sociedades africanas asisten, impotentes, a la erosión de sus culturas. La Iglesia solo puede formar auténticos cristianos si encara con seriedad el enraizamiento cultural del mensaje evangélico. En este año Jubilar de San Pablo, las Iglesias particulares desean ardientemente que los Padres sinodales coloquen esta figura en el centro de sus reflexiones, pues el Apóstol fue un artífice excepcional de la inculturación del mensaje bíblico en los nuevos contextos culturales. Es lo que la Iglesia es llamada a hacer también hoy. Ella debe hacer penetrar la Palabra de Dios en la pluralidad de las culturas y expresarla según sus lenguajes, sus concepciones, sus símbolos y sus tradiciones religiosas.

97. En el sector de la educación, numerosas Iglesias particulares colocaron en marcha estructuras, no sin dificultades. Pero su gestión es difícil a causa del número excesivo de jóvenes y de la falta de personal cualificado. Porque los jóvenes no tienen espacios de ocio, y de juegos para los recreos, se divierten en lugares donde las malas compañías los arrastran a la droga, a la violencia. Además se tornan víctimas de abusos sexuales y de otros crímenes, cuando no son requisitados como soldados en las guerras o explorados por el trabajo en los campos o en las minas. La situación empeora cuando se trata de huérfanos o, más genéricamente, cuando falta el interés, el acompañamiento y el control de la familia. Trabajar con la juventud y para ella, es pensar en el futuro de toda la sociedad. Esta tarea se impone, por eso, a todos los cristianos. Las escuelas católicas comparten esta preocupación, pero las que no se benefician de subvenciones del estado, difícilmente se mantienen, o se mantienen con costos prohibitivos para los pobres. A pesar de todo el desarrollo de las universidades católicas en el continente es notable. La dedicación y atención a los estudiantes de enseñanza secundaria y universitaria por parte de todos los que trabajan en el sector educativo son dignos de admiración y merecen el estímulo de toda la Iglesia.


133. Involucrarse la Iglesia en el sistema educativo es un acto evangélico mayor para salvar a todo el hombre, de modo a preparar para mañana una sociedad sana, pacífica y responsable. En las regiones o países donde las instituciones de la Iglesia fueron confiscadas por el estado, se han hecho esfuerzos para invertirlo de tal modo que vuelvan a estar a servicio de la población.


134. Para que los servicios educativos se tornen mejores, es necesario perfeccionar las condiciones de quienes enseñan y su competencia; ofrecer, en convenios con el Estado, una formación escolar al alcance de todos; incluir a los padres por medio de asociaciones y seminarios sobre la educación; proponer un programa de educación integral (intelectual, moral, espiritual, humana y profesional), estimular las tutorías y los intercambios de programas, reconocer los méritos y tomar iniciativas de autofinanciación. Estas son vías importantes para un futuro de paz y bienestar.


141. Los jóvenes católicos de ciertas regiones son propagadores de los valores evangélicos. Transmiten aquello que ellos mismos recibieron a través de una educación cristiana para la vida y el amor. Cabe por eso a todos los adultos cristianos al tarea de transmitir a la juventud los valores del discípulo de Cristo para que, por su vez, se tornen sal y luz. Esta transmisión será más eficaz si los jóvenes entran en contacto con verdaderos líderes que encarnen los valores que les son enseñados a través del ejemplo, el esfuerzo, la asiduidad al trabajo, y cuyo ejemplo es una palabra verdaderamente formativa.

domingo, 22 de marzo de 2009

Sobre la Cultura Africana

(Del Instrumento de trabajo para el Sínodo de los Obispos de África “La Iglesia en África hoy )

(...)


Algunos lugares-clave de la vida de las sociedades


3. Área sociocultural


30. Los pueblos africanos mantienen en numerosas regiones del continente, un amor profundo por su cultura. Los artistas, los músicos, los escultores, etc. expresan su genio por medio de obras cada vez más reconocidas. Reconocemos que el enraizamiento cultural condiciona el desarrollo integral de los individuos y de las colectividades. Así, hombres y mujeres del continente se asocian para promover la herencia cultural de su territorio. Algunos Estados se empeñan en ello con resolución. ¿Será que estas acciones concertadas permitirán salvaguardar los valores africanos auténticos de respeto a los ancianos, hacia la mujer como madre, la cultura de la solidaridad, la ayuda mutua y la hospitalidad, la unidad, el respeto por la vida, la honestidad y la verdad, la palabra dada, etc., amenazadas por valores originados en otros continentes y difundidos a través del fenómeno de la globalización?


31. La desfiguración de la identidad cultural condujo a un desequilibrio interior en las personas, que se manifiesta en el relajamiento moral, en la corrupción y el materialismo, en la destrucción del casamiento auténtico y de la noción de una familia sana, en el olvido de las personas mayores y en la negación de la infancia. Una cultura de violencia, de división, de guerrillero-héroe se instaló en la secuencia de los conflictos armados. Parece que un proceso organizado de destrucción de la identidad africana esté en marcha bajo el pretexto de la modernidad. Y éste será tanto más eficaz cuanto más se mantenga el analfabetismo debido a la poca inversión en la educación por los poderes públicos. La educación de la juventud es, así, abandonada a la influencias de los antivalores propagados por los medios de comunicación, por ciertos políticos y otras figuras públicas.


32. Ciertas creencias y prácticas negativas de las culturas africanas exigen aún una vigilancia particular: la hechicería dilacera a las sociedades rurales y urbanas, y, en nombre de la cultura o de la tradición ancestral, la mujer se torna víctima de los preceptos en materia de herencia y de los ritos de viudez, de mutilación sexual, de casamiento forzado, de poligamia, etc.

33. En estas diferentes áreas las Iglesias particulares se sienten interpeladas y esperan tanto del discernimiento de los Padres sinodales a la luz de la Revelación.

viernes, 20 de marzo de 2009

Desde Yaundé, Camerún







YAUNDÉ, miércoles, 18 marzo 2009 (ZENIT.org).

La expansión de las sectas y la difusión del relativismo --ideología según la cual no hay verdades absolutas--, tienen un mismo antídoto, según Benedicto XVI: la formación.


Así lo explicó este miércoles, en su segundo día de visita a Camerún, en el encuentro que mantuvo con la Conferencia Episcopal de ese país, en la Iglesia Cristo Rey de Tsinga, en Yaundé.


"El desarrollo de las sectas y movimientos esotéricos, así como la creciente influencia de una religiosidad supersticiosa y del relativismo, son una invitación apremiante a dar un renovado impulso a la formación de jóvenes y adultos, especialmente en el ámbito universitario e intelectual", aseguró el Santo Padre.


Por este motivo, el Papa alentó los esfuerzos de todas las instituciones eclesiásticas cuya misión es hacer accesible y comprensible a todos la Palabra de Dios y las enseñanzas de la Iglesia, como es el caso del del Instituto Católico de Yaundé, prestigioso centro universitario.


Asimismo el Papa confesó su alegría al saber que "son cada vez más en vuestro país los fieles comprometidos en la vida de la Iglesia y la sociedad".


"Las numerosas asociaciones de laicos que florecen en vuestras diócesis, son signo de la acción del Espíritu en el corazón de los fieles y contribuyen a un renovado anuncio del Evangelio".


En particular el Papa alentó "la participación activa de las asociaciones femeninas en diferentes sectores de la misión de la Iglesia, demostrando así una toma de conciencia real de la dignidad de la mujer y de su vocación específica en la comunidad eclesial y en la sociedad".


También dio gracias a Dios "por la voluntad que muestran los laicos en vuestras comunidades de contribuir al futuro de la Iglesia y al anuncio del Evangelio".


El Santo Padre pidió "encarecidamente" a los obispos que perseveren en sus esfuerzos por ofrecer a los laicos "una sólida formación cristiana que les permita desarrollar plenamente su papel de animación cristiana del orden temporal (político, cultural, económico, social), que es compromiso característico de la vocación secular del laicado".


miércoles, 18 de marzo de 2009

En el Senado de Kansas





Cuando se el pidió al religioso Joe Wrigh que hiciera la oración de apertura en el senado de Kansas, todo el mundo esperaba una oración ordinaria, pero esto no es lo que ellos escucharon:


"Señor, venimos delante de Ti este día, para pedirte perdón y para pedir tu dirección.

Sabemos que tu Palabra dice: 'Maldición a aquellos que llaman bien lo que está mal' y es exactamente lo que hemos hecho:

Hemos perdido el equilibrio espiritual y hemos cambiado nuestros valores. Hemos explotado al pobre y hemos llamado a eso 'suerte'.

Hemos recompensado la pereza y la hemos llamado 'ayuda social'.

Hemos matado a nuestros hijos que aún no han nacido y lo hemos llamado 'la libre elección'

Hemos abatido a nuestros condenados y lo hemos llamado 'justicia'.

Hemos sido negligentes al disciplinar a nuestros hijos y lo hemos llamado 'desarrollar su autoestima' .

Hemos abusado del poder y hemos llamado a eso: 'política'.

Hemos codiciado los bienes de nuestro vecino y a eso lo hemos llamado 'tener ambición'.

Hemos contaminado las ondas de radio y televisión con mucha grosería y pornografía y lo hemos llamado 'libertad de expresión'.

Hemos ridiculizado los valores establecidos desde hace mucho tiempo por nuestros ancestros y a esto lo hemos llamado 'obsoleto y pasado'.

Oh Dios, mira en lo profundo de nuestros corazones; purifícanos y líbranos de nuestros pecados. Amen”.

lunes, 16 de marzo de 2009

Via Crucis a pie de pupitre

No hace falta ir en procesión por las diferentes cruces; mejor, te quedas sentado en tu mesa y recorres en tu corazón el camino del Calvario... No te preocupes si no entiendes o no estás muy de acuerdo con algu­na de las estaciones...

I Estación: Sentenciado a sentarse en el último lugar. No, no mires para atrás, no van por ahí los tiros... Tu com­pañero se ha matriculado en el mismo centro que tú, tiene nombre y apellidos como tú, llega todas las mañanas con la mochila a cuestas como tú, y sin embargo ha sido condenado, sin haber cometido delito alguno, a llevar una vida muy diferente a la tuya.

II Estación: Es cargado con la cruz. La cruz de una cultura diferente a la tuya por la que es rechazado, la cruz de una familia desestructurada en la que el amor brilla por su ausencia, la cruz de una enfermedad o una defi­ciencia que intenta ocultar por todos los medios... ¡Puedes continuar la lista!

III Estación: Cae por primera vez. Ocurrió mientras estabas charlando con los amigos en un cambio de clases, pero no te alarmes, no requirió atención médica... ¡Está tan acostumbrado! Además, como comentáis en el co­rrillo tan a menudo, siempre «va a su bola.» Por cierto, ¿os habéis preguntado alguna vez el porqué?

IV Estación: Se encuentra con su madre. Los días pasan y su madre es la única persona que comparte su do­lor, aunque él prefiere no decirle nada. ¡Ha sufrido ya tanto...!

V Estación: Le ayudan a llevar la cruz. Él hubiera preferido que le hubieras echado una mano tú, si supieras cuánto se hubiera alegrado... Al final ha sido el psicólogo del centro, el que, alertado por el tutor, se ha hecho cargo del asunto.

VI Estación: Le limpian el rostro. No ha tenido más remedio que acudir a la enfermería, aunque me temo que ese tipo de heridas no se cura con un poco de alcohol y unas gasas.

VII Estación: Cae por segunda vez. Lo intentó, es cierto que se introdujo silenciosamente en el mismo grupo en el que estabas tú, sin embargo no volvió a incordiar más... Te acuerdas sí le dijisteis algo o, lo que es peor, tal vez no le dijisteis absolutamente nada.

VIII Estación: Te consuela. Tú que, en un arranque de generosidad, te acercas a él y... ¡No pasa nada, no te pre­ocupes! Bueno, al menos ya has cumplido.

IX Estación: Cae por tercera vez. En esta ocasión, como en las anteriores, tú no sabes nada, el que le puso la zan­cadilla fue otro, el que le insultó también fue otro, el que se burló de él fue otro... Sabes una cosa: hay gente que escoge la violencia para matar, otros, el poder para humillar, y otros, la indiferencia... y no sé cuál será peor.

X Estación: Es despojado de sus vestiduras. Por mucho que ha intentado vestir a la moda como tú, tener los mismos gustos que tú, ir a los mismos lugares de marcha que tú..., ¡ha resultado en vano! Le habéis despojado de algo mucho peor: de vuestra compañía.

XI Estación: Es clavado y bien clavado. Ya se ha dado sobradamente cuenta de que su sitio es otro muy lejos de donde estás tú. Es curioso, apenas a unos metros de tu pupitre y sin embargo tu corazón se encuentra a mi­les de kilómetros del suyo.

XII Estación: Muere. No te preocupes, ni van a suprimir las clases para ir al funeral, ni vas a tener que dar el pé­same a su familia. De todas formas es duro decirlo, pero hace mucho tiempo que él ha muerto para ti, ¿verdad?

XIII Estación: Es bajado de la cruz. Por primera vez toda la clase se junta para hablar de él, ¿dónde estará? ¿Se habrá matriculado en otro centro? ¿Alguien tiene su número de móvil?..

XIV Estación: Es colocado en el sepulcro del olvido. Y es que en un semana, al máximo dos, ya nadie se acor­dará de él.

XV Estación: «El que acoge en mi nombre a un compañero como éste, a mí me acoge.» (Mt 18, 5).

JOSÉ MARÍA ESCUDERO
REVISTA Misión joven, marzo 2009

sábado, 14 de marzo de 2009

Mensaje desde República Dominicana

Conferencia del Episcopado Dominicano

(Extraido del Mensaje con motivo del 27 de febrero de 2009)

“Construyamos la paz, erradiquemos la violencia y la inseguridad”


" 1. La Fiesta de Nuestra Señora de la Altagracia, Protectora de la República Dominicana, nos ofrece, como cada año, una ocasión magnífica para que, nosotros Obispos, llevemos a todo el pueblo de Dios, presbíteros, diáconos, consagrados y consagradas, laicos y laicas y todos los dominicanos y dominicanas, un mensaje de esperanza tan necesario en este tiempo de tanta incertidumbre.

27. Son muchos los ambientes en los que hay que hacer un claro y definido anuncio de un Cristo vivo, con un mensaje capaz de ofrecer esperanza al mundo. En muchos de ellos se manifiestan de manera descarada las obras de la carne: el narcotráfico y la corrupción; la evasión fiscal, la corrupción administrativa y el indiferentismo; el tráfico ilegal de personas y la prostitución; el sexo desenfrenado y el aborto, la infidelidad matrimonial, la violencia intrafamiliar, el alcohol, la droga, la pornografía, el crimen, el abuso infantil, entre otros. Todas estas son cosas que pueden ser iluminadas parafraseándolo: "quienes hacen tales cosas no heredarán el Reino de Dios"

51. Reconocemos y agradecemos a todos los misioneros, misioneras y catequistas que, desde hace tantos años, han venido evangelizando y a todos los agentes de pastoral que con entusiasta dedicación llevan adelante nuestro Plan de pastoral y les exhortamos a seguir impulsando con vigor nuestro itinerario evangelizador estimulados por el testimonio del Apóstol Pablo".

jueves, 12 de marzo de 2009

Dinámica del Paradigma Ignaciano



(Extraído de Pedagogía Ignaciana - un planteamiento práctico)

(32) La comprensión del Paradigma Pedagógico Ignaciano debe considerar tanto el contexto del aprendizaje como el proceso más explícitamente pedagógico. Se consideran por tanto cinco pasos: CONTEXTO, EXPERIENCIA, RE­FLEXIÓN, ACCIÓN, EVA­LUA­CIÓN.

(33) 1. EL CONTEXTO DEL APRENDIZAJE:

(38) Los profesores y los demás miembros de la comunidad educativa debe­rían, en consecuencia, tener en cuenta:

a) El contexto real de la vida del alumno que incluye su familia, los com­­pa­­ñeros, las situaciones sociales, la misma institución educativa, la política, la eco­nomía, el clima cultural, la situación eclesial, los me­dios de comunicación, la música y otras realidades. Todo esto tiene un im­pacto positivo o negativo en el estudiante.

(39) b) El contexto socio-económico, político y cultural dentro del cual se mueve un alumno, puede afectar seriamente a su crecimiento como «hom­bre para los de­más». Por ejemplo, una cultura de pobreza endé­mica afecta negativamente, en general, a las expectativas de éxito esco­lar; los regí­menes políticos opresivos bloquean los cuestionamien­tos que pueden poner en peligro sus ideolo­gías domi­nantes.

(40) c) El ambiente institucional del colegio o centro educativo, es decir, todo el com­plejo y a menudo sutil conjunto de normas, expectativas y especialmente de relaciones que crean la atmósfera de la vida esco­lar. Recientes estudios sobre las escuelas católicas destacan la impor­tan­cia de un ambiente positivo en la escuela.

(41) d) Los conceptos previamente adquiridos que los alumnos traen con­sigo al comienzo del proceso de aprendizaje. Sus puntos de vista y los conceptos que pueden haber adquirido en aprendizajes anteriores, o haber captado espontánea­mente de su ambiente cultural, así como los sen­ti­mientos, actitudes y valores que tienen respecto a la materia que van a estudiar, todo ello forma parte del contexto real de la enseñanza.

domingo, 8 de marzo de 2009

Noticias desde República Dominicana - III




Más noticias del EDUFI

"El desarrollo del evento fue como esperábamos: muy dinámico, la acogida fue fabulosa. Cada grupo o persona que entraba al centro era recibido con frases de bienvenida y canciones navideñas que alegraban e infundían animo a todo el que entraba, además de saborear un delicioso café y un sabroso té acompañado de galletitas.

Se inició formalmente con una oración a cargo del Politécnico Virgen de la Altagracia. Este centro nos presentó una obra muy enternecedora y sobre todo muy original de la vida de la Madre Cándida.

Después la Hna. Oliva Hernando nos presentó, de manera interactiva, los rasgos característicos de las Hijas de Jesús y los Principios Educativos que fundamentan y sustentan nuestro modo propio de educar. Todas/os los educadores coincidíamos en los mismos: (cercanía, humildad, alegría, sencillez, universalismo, la mayor necesidad, sentido de iglesia, espíritu misionero…). El constatar esta realidad, una vez más, fue motivo de gran emoción al confirmar que realmente estos son los rasgos que nos caracterizan.

Este momento finalizó con la presentación también de una síntesis en powerpoint del Plan Internacional de Acción evangelizadora y del Proyecto de Educación Latinoamericano y del Caribe. Todo fue acogido con mucha disposición y entusiasmo por todos y de todas las presentes.

La interacción de los participantes fue muy buena porque se puntualizó la importancia de revisar la acción evangelizadora desde la educación formal".

Amalia Tejada


¡¡¡ Hoy, Día Internacional de la Mujer, muchas felicidades para todas las Hijas de Jesús y para las docentes y funcionarias que comparten con nosotras la misión de educar en el ancho mundo!!!

viernes, 6 de marzo de 2009

Noticias desde República Dominicana - II





Más noticias del EDUFI

Como cada año, este encuentro es todo un evento para la gran familia de la Congregación Hijas de Jesús. Tanto las hermanas como los laicos/as nos abocamos a preparar todas las actividades que se realizaran en el mismo, y cada centro prepara su participación en el desarrollo de la agenda.

El contenido del encuentro es muy educativo y las actividades son dinámicas, reflexivas, recreativas y sobre todo pedagógicas. Este año el Politécnico Virgen de la Altagracia ha tenido la responsabilidad de la oración, la escuela San Martín de Porres la conducción del encuentro y la Escuela Virgen del Carmen la evaluación. Del momento recreativo nos responsabilizamos los tres centros. Fueron varias las actividades que presentamos. Cerramos el encuentro con los compromisos, que como centros educativos, asumíamos relacionándolos con los principios educativos que sustentan nuestra acción educativa.


Compromisos:


v Conocer más a fondo los principios que han surgido para ponerlos en práctica.
v Seguir siendo luz de las Hijas de Jesús.
v Asumir con responsabilidad la tarea de educar.
v Renovarse cada día para hacer que nuestra práctica sea significativa.


Lucía Guzmán

miércoles, 4 de marzo de 2009

Noticias desde República Dominicana - I





EN LA ESCUELA "SAN MARTIN DE PORRES"


Cada 8 de diciembre festividad de la fiesta de la Inmaculada Concepción, celebramos el aniversario de la fundación de la Congregación Hijas de Jesús. Este acontecimiento propicia el Encuentro de Educadores de las Hijas de Jesús (EDUFI).

Este año, como el anterior, lo celebramos a nivel regional. En Santo Domingo los anfitriones fuimos nosotros en la escuela San Martín de Porres de Guachupita.

La preparación de este evento tan esperado por todas/os nosotras/os es una experiencia emocionante y llena de vida. Todo el personal de la escuela se involucra participando en los diferentes equipos de trabajos (brindis, decoración, mantenimiento, recibimiento, recreación…)

Andábamos todos con el interés de que quedara lo mejor posible, pero lo más interesante es que las/os maestras/os, personal administrativo y de apoyo, alumnas/os, realizaron las actividades de preparación en los recesos y horas de descanso.

La comunidad Educativa completa participó en una jornada de limpieza general del centro que se realizó el 3 de diciembre. Los padres y madres colaboraron con los detergentes y otros materiales de limpieza.

Fue muy emocionante la preparación de nuestro EDUFI pues, cuando se vive en familia y sentimos el mismo amor por nuestra Madre Cándida y la Congregación, realizamos las actividades y lo que nos proponemos con alegría.


María del C. Villavicencio



lunes, 2 de marzo de 2009

Vocación evangelizadora




(De la Carta pastoral de los obispos de Bilbao, Pamplona, San Sebastián, Tudela y Vitoria, 25 de febrero)

“Nuestra Escuela Católica ha dado en los últimos años pasos sumamente notables a la hora de mejorar su calidad pedagógica y técnica. Estáis realizando verdaderos esfuerzos para ofrecer y transmitir la fe cristiana y cumplir así vuestra irrenunciable vocación evangelizadora.

Muchas veces nos comunicáis vuestra desazón al comprobar la desproporción entre los recursos dedicados a esta misión y la modestia de los resultados obtenidos con los alumnos y sus familias. Tal vez podáis a veces sentiros algunos tentados de rebajar la extensión y la intensidad de vuestro ofrecimiento creyente. No sucumbáis nunca a esta tentación. Mejorad el «cómo», pero no descuidéis el «qué».

Sed vosotros por vuestro testimonio orante, acogedor, abnegado, anuncio de vuestra fe. Formad a los profesores laicos en la fe y en la vocación educadora. Utilizad la Biblia de manera intensiva y pedagógica. Familiarizad con ella a vuestros alumnos y alumnas y a sus padres. Orad entre ellos con la Biblia en las manos.

Vosotros sois, por vuestra entrega a los niños y adolescentes y por vuestra relación con los padres uno de los puentes que la comunidad eclesial ha de cuidar. Si en algún momento ha sido necesaria la Escuela Cristiana, lo es en la época actual. Necesitáis y merecéis nuestro aprecio, nuestro apoyo cordial mucho más que nuestras observaciones críticas”