domingo, 31 de mayo de 2009

El Espíritu Santo, María y la M. Cándida




Se juntan hoy tres celebraciones profundamente significativas para nosotros: la fiesta solemne de la venida del Espíritu Santo, María Madre del Amor Hermoso y el nacimiento de la M. Cándida, - y con ella el futuro nacimiento de la Congregación. La Madre Fundadora siempre estuvo abierta al querer de Dios, a la inspiración del Espíritu Santo, y, encomendándose a la protección de María como Estrella de nuestros caminos, se entregó al Señor en la misión educativa.

La M. Cándida, cuando todavía es Juana Josefa, abierta a Dios y a la realidad concreta de las personas y circunstancias de su tiempo, se siente llamada a responder a una gran necesidad de aquel momento: la educación humano-cristiana de la niñez y juventud. (NMPE 1b)

Traduciendo el proyecto que la M. Cándida ofreció a la sociedad de su tiempo: los colegios, las escuelas dominicales y la academia de maestras, las Hijas de Jesús nos comprometemos también en la educación integral a través de formas variadas de escuela, en las que aspiramos a llevar a cabo: la instrucción completa de niños y jóvenes, la promoción cultural y humana de trabajadores adultos necesitados de ella, y la preparación de laicos como profesionales de la educación. (NMPE 33)

La escuela no agota las posibilidades de educación integral cristiana: cabe destacar otras formas avaladas por nuestra experiencia como Hijas de Jesús y, en algunos casos, por una larga tradición:

- Los internados, que comienzan a existir y a ejercer su influencia educativa desde el momento en que la Congregación inicia sus primeras obras.
- Las residencias, hogares y colegios mayores, que, a través del paso del tiempo, han ido surgiendo con la misma finalidad
. (NMPE 35)


¡¡Feliz Día!!

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